Vale lo tecno, pero más el maestro

POR RICARDO ROA Clarin

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• Del editor al lector

09/07/13 – Clarin

Si hay una fotografía de los cambios, ésa es la de las nuevas palabras que incorpora el diccionario. Podría decirse que esta foto es en realidad una foto forzada por los cambios. Sea como fuere, ahí pueden encontrarse las marcas registradas de época, sobre todo desde que la Real Academia Española abandonó una posición purista y abrió el idioma a nuevos términos y expresiones.

Un poco más de diez años atrás aceptaba Internet, salvapantalla y digitalización entre otras. Y más acá, hace seis, aerobismo, neura o animal político, que ya parecen arcaísmos. Ahora la Fundación del Español Urgente (Fundéu) que es asesorada por la Real Academia, acaba de recomendar que se admitan varios anglicismos, y todos de la cultura tecno como wasap y wasapear, o guasap o guasapear que es una castellanización, con perdón de la palabra, derivada como las otras de la aplicación WhatsApp de mensajes gratuitos que ya utilizan 250 millones de personas.

Justamente, semejante universo de usuarios explica que estas palabras sean de uso corriente como lo son ya resetear o guglear o tuitear, aunque algunas o varias de ellas esperen turno para ser consagradas en el diccionario. Pero indica algo más: la presencia avasallante de la tecnología en la vida de todos los días.

Un experto en educación, Gustavo Iaies, advierte sobre dos derivaciones de este fenómeno en la enseñanza. Uno es el de ladistracción en las aulas y el otro es el rol de la escuela frente alaluvión de información dando vueltas en las redes.

Según el Pew Research Center de Washington, el 87% de 2.500 docentes consultados consideró que las tecnologías están creando “una generación que se distrae fácilmente, con períodos de atención muy breves ”. No hay posibilidad de entender y manejar las destrezas del pensamiento sin concentración.

Otro estudio, el del National Bureau of Economics, llegó a una conclusión todavía más contundente: después de evaluar durante dos años el comportamiento de cientos de chicos, afirma que el uso de tecnología no mejora el rendimiento académico. Por esta y otras razones, universidades norteamericanas decidieron apagar laptops y celulares, de acuerdo a The Washington Post.

Iaies sostiene que la escuela no debe subordinarse ni despreciar las tecnologías porque “son herramientas que pueden potenciarla o mejorarla en algunos procesos y en otros no”. Lo que hace buenos maestros “no es la tecnología sino su capacidad de seleccionar los conocimientos y las formas adecuadas de enseñarlos para mejorar la capacidad de los chicos de construir el conocimiento”.

Las redes ponen todo al alcance, pero la escuela funciona seleccionando saberes. Está todo a la mano, pero si la escuela no enseña a leer, comprender y producir un texto no lo va a hacer ninguna computadora por moderna que sea.